Para escuchar sin prejuicios (1): Abba

A principios de los años setenta, cuatro suecos llamados Anni-Frid, Agnetha, Bjorn y Benny formaron uno de los grupos de más éxito de los setenta y principios de los ochenta.

Bautizaron el grupo jugando con las iniciales de sus cuatro integrantes. El resultado: ABBA.

Un grupo concebido especialmente para gente dispuesta a disfrutar al máximo con melodías más que pegadizas, grandes estribillos, armonías vocales, sonido muy cuidado y diversión sin mayores pretensiones. Lo que se conoció como “Europop”, en su versión original.

El salto a la fama de Abba tuvo lugar en 1974, cuando ganaron el festival de Eurovisión, celebrado en Brighton, con la canción Waterloo.

Desde entonces ha vendido más de 250 millones de discos.

Discografía:

1973	Ring Ring
1974	Waterloo
1975	ABBA
1976	Arrival
1977	The Album
1979	Voulez – Vous
1980	Supertrouper
1981	The Visitors
1986	ABBA Live

De su discografía, me gustan especialmente tres discos, los que harían los números segundo, tercero y cuarto.

1974. Waterloo:

El primer gran superventas de los suecos, tras su paso por el festival de Eurovisión. En él ya se pone de manifiesto lo que son capaces de hacer: Talento para las melodías y los arreglos, facilidad para encontrar el estribillo adecuado, sentido del ritmo y grandes coros y armonías vocales.

Se trata, además, de un disco muy variado, que recoge desde guitarras distorsionadas casi de Hard Rock (King Kong Song) hasta ritmos caribeños y reggae (Sitting In The Palmtree), pasando por el pop más descarado y pegadizo marca de la casa (Waterloo) y los ritmos de Folk-Rock.

Destacan las canciones Waterloo y Honey Honey, los dos singles de éxito.

1975. Abba:

El disco con el que ABBA empieza a batir records de ventas jamás antes conocidos por ningún grupo sueco. Los Singles I Do, I do y Mamma Mia se convirtieron en grandes éxitos mundiales.

Musicalmente, es una vuelta de tuerca más al estilo que les haría tan populares, incorporando ya en la función elementos de música de baile, junto con esa mezcla de estilos y esos juegos de voces que caracterizan al grupo, y poco a poco dando forma al sonido europop.

1976. Arrival:

Con este disco, ABBA termina de demostrar, si no lo había hecho ya en su disco anterior, que no era un éxito efímero producto de su victoria en Eurovisión.

La música da un paso adelante más en cuanto a calidad de las composiciones y arreglos. Arrival, la composición de aires celtas, (que utilizaría más adelante Mike Oldfield en Tubular Bells) ya era de una complejidad no habitual en el clásico perfil de “ganador de eurovisión”.

Liberados de ese “estigma”, ya se dedican a lanzar un éxito detrás de otro: composiciones discotequeras como Dancing Queen, canciones más melancólicas como Knowing Me Knowing You, y exitazos de puro pop como Money Money Money y Fernando, lanzaron al grupo a lo más alto.